jueves, 26 de noviembre de 2015

10 Especies en peligro de extinción



La Fauna mexicana con mayor peligro de extinción.

Introducción.
En los últimos años nuestra biodiversidad mexicana ha sido muy afectada, vemos como bosques, selvas, flora y fauna están quedando al borde de su existencia. La fauna se encuentra con mayor porcentaje de peligro de extinción, pues  hoy en día la vemos  menos presente en nuestro país.
De acuerdo con la Norma Oficial Mexicana, NOM-059-ECOL-2001, cuando se hace referencia al peligro de extinción se trata de aquellas especies cuyas áreas de distribución o tamaño de sus poblaciones en el territorio nacional han disminuido drásticamente poniendo en riesgo su viabilidad biológica en todo su hábitat natural, debido entre otros a factores como la destrucción o modificación drástica del hábitat, aprovechamiento no sustentable, enfermedades o depredación.
 También la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) menciona que entre los animales en peligro de extinción se encuentran 10 especies con el mayor peligro de desaparecer, algunas ya no se pueden ver en libertad dentro de su habitad, y una de las  principales causas que incrementa la extinción de ellas son  la cacería.
Es por eso que se necesita conoceremos  los diferentes animales que hoy en día están con mayor peligro de extinción, el cual debe ser motivo para hacer conciencia en el cuidado de ellas y ayudar a preservar las especies más amenazadas.


Desarrollo:
Actualmente 10 de los animales considerados en peligro de extinción se encuentra el jaguar, la tortuga caguama, el ajolote mexicano, la guacamaya roja, el oso negro, la vaquita marina, el manatí de las Antillas, el lobo mexicano, el conejo de los volcanes y el tapir.
 Son varias las causas de amenazas de extinción, pero el mayor responsable es el HOMBRE, que debido a la alteración de los hábitats como; destrucción de lagunas, Manglares, Pantanos, Áreas rocosas, Bosques de tierras bajas, Drenaje y relleno de tierras inundables. Contaminar nuestro ambiente fomenta a la destrucción total del mismo, el ser partícipe de la cacería de los animales en peligro de extinción es una amenza letal.
Si bien la civilización ha creado el problema, es también la más indicada para impedirlo.
Según datos de la Conabio y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés), estas especies tienen algunas de las poblaciones con el menor número de ejemplares en México, que van desde los 20 hasta los 12,000 aproximadamente.
Las regiones que albergan a estos animales en peligro de desaparecer son la Ciudad de México y los estados de Chihuahua, Sonora, Baja California, Nuevo León, Quintana Roo, Chiapas, Oaxaca, Tabasco, Veracruz, Campeche, Jalisco, Yucatán, Durango, Tamaulipas y Coahuila.

EL LOBO GRIS MEXICANO.

El lobo gris mexicano (Canis lupus baileyi) es una subespecie del lobo, una de las más pequeñas comparado con otras subespecies. 

En 1976 fue declarado una subespecie amenazada, y su situación aun así fue empeorando ya que actualmente está clasificado según la UICN como Extinto en estado salvaje (EW), lo que quiere decir que no existe ningún ejemplar viviendo en libertad. 

En los últimos tiempos no ha sido de mucho éxito introducirlo nuevamente en su hábitat, pues ahora mayormente podemos verlo en zoológicos.

El lobo gris tiene una  longitud  de aproximadamente 1´35, su peso varía de los 27 kg hasta los 45 kg , viven en manadas formadas por 5 a 12 ejemplares, su esperanza de vida es de 8 a 13 años en estado salvaje y de 12 a 15 años en cautividad, su pelaje es de color gris a veces con un tinte rojizo. 

Se alimentan principalmente de alces, ciervos, pecaríes (una especie de cerdo silvestre), conejos y roedores, en muchas ocasione  se vieron obligados a atacar al ganado para sobrevivir, lo que produjo campañas de exterminio por parte de agencias gubernamentales de los Estados Unidos, así como la caza desmedida de ganaderos mexicanos. 
A larga distancia se comunican con aullidos y olores, y a corta distancia mediante el leguaje corporal, facial y algunas vocalizaciones, de manera parecida a como lo hacen los perros domésticos

El comportamiento natural de los lobos mexicanos no están bien documentado, pero probablemente será similar al de otras subespecies de lobo gris. La razón es que cuando fueron estudiados en su hábitat natural ya estaban al borde de la extinción y los resultados no son muy seguros. 


El Jaguar.
El jaguar es el felino de mayor tamaño en América y el tercero en el mundo (después del león y el tigre), el color de la piel varía de amarillo pálido a café rojizo y cambia a blanco en el pecho y en la parte interna de las extremidades. En todo el cuerpo tiene manchas negras, que en los costados cambian en rosetas, dentro de estas puede haber una o más manchas pequeñas (Ceballos y Oliva, 2005).
En general las hembras miden de 157 a 219 cm de largo y los machos de 172 a 241 cm (Seymour, 1989). El peso corporal es mayor en machos (64 a 114 kg) que en las hembras (45 a 82 kg; Leopold, 1988). Las medidas corporales del jaguar cambian con respecto a la variación geográfica, en Mesoamérica son más pequeños que en Sudamérica (Oliveira, 1994). Tradicionalmente se reconocían ocho subespecies, desde el sur de Estados Unidos hasta el sur de Argentina (Wozencraft, 1993); sin embargo, con base en una revisión extensa de variables craneales, Larson (1997), concluyó que no hay diferencias significativas suficientes para considerar ocho subespecies. Lo mismo concluyó Eizirik E. et al., 2001 al realizar un análisis de la estructura genética en las poblaciones de jaguar.
Es un depredador oportunista que aprovecha las distintas presas disponibles y vulnerables en cada lugar particular. Se alimenta principalmente de pecarís, venados, monos, tapires, mapaches, tejones, armadillos, conejos y otros pequeños mamíferos, aves, peces, aún de cocodrilos, lagartijas, serpientes, tortugas y sus huevos e incluso de carroña (SEMARNAP, 2000).

LA TORTUGA CAGUAMA.
La tortuga caguama (caretta caretta) tiene la cabeza más grande que cualquier otra especie. La forma del cuerpo es muy similar a la forma de un corazón. Tienen un caparazón de color rojo y marron en la parte superior y amarillo y marron en la parte inferior. Pueden llegar a pesar hasta 250 libras cuando están completamente desarrollados y medir cerca de cuatro pies de largo.
Se alimentan de gran variedad de alimentos como peces, cangrejos, medusas, camarones, moluscos y crustáceos
 Prefieren estar en áreas que ofrecen playas llenas de arena granulada. Por esta razón se encuentran muchos de ellos a lo largo de la costa de México y las Bahamas. Sin embargo, también hacen sus hogares en diversas lagunas y bahías.
La tortuga caguama en la actualidad tiene la condición de Especie Amenazada. Está estrechamente vigilada y esfuerzos están en marcha para ayudar al crecimiento de su población. Esperemos que con la temprana intervención se mueva más alta en las filas para convertirse a especie en peligro de extinción.

EL AJOLOTE MEXICANO
El ajolote (Ambystoma mexicanum) , está en peligro crítico de extinción.

Tras estar catalogado como raro desde 1986, y como vulnerable desde 1996, en el 2006 pasó a estar en peligro crítico debido a que su situación es muy preocupante en libertad. Uno de sus problemas es que actualmente la población en libertad ocupa menos de 10 km2 de área de ocupación; además, su población está muy fragmentada y la calidad de su hábitat y el número de ejemplares sufre un continuo declive. 
La población que queda en libertad es realmente muy pequeña, vive permanente en el agua y que no sufre metamorfosis completa. Son salamandras que conservan su estado larvario durante toda su vida y pueden ser: 

Albinos (pose en ojos  blancos), blancos (pose en sus ojos  negros) 
Blancos parciales (los cuales poseen manchas negras y/o marrones aparte de su cuerpoblanco)Pardos (con una coloración verde oscura) o negros. 

Requiere de aguas profundas de lagos y canales tanto naturales como artificiales con abundante vegetación acuática, ya que necesitan esta para depositar sus huevos. 
En su etapa adulta puede medir entre 25 y 30 cm, en laboratorio su esperanza de vida es de 5 a 6 años, sin embargo, algunos animales viven hasta 10 o 15 años. La mayoría de los animales de laboratorio mueren poco después de la metamorfosis 

No mudan la piel al contrario de lo que les pasa a las salamandras y otros anfibios metamorfoseados.
Estos anfibios son de carácter tranquilo y pasivo, excepto cuando se alimentan, pueden morderse los unos a los otros e incluso amputarse partes del cuerpo.
Esta especie se encuentra en México en la categoría de Protección Especial (Pr) en la NOM-059-SEMARNAT-2001, que es la categoría que acoge a las aquellas especies que podrían llegar a encontrarse amenazadas por factores que inciden negativamente en su viabilidad. Sin embargo, a fecha de Enero de 2007 estaba en proceso de pasar a la categoría de en peligro. 
LA GUACAMAYA ROJA.
La guacamaya roja ocupa el cuarto lugar en tamaño entre las 17 especies de guacamayas en América. La norma oficial mexicana NOM-059-ECOL-200. CITES Apéndice I Se estima que no quedan más de 200-300 parejas en vida libre en las selvas del país. Una de las amenazas ha sido Deforestación, se estima que en los últimos 40 años se ha perdido el 90% de las selvas en México y con ellas el hábitat de la guacamaya roja. Tráfico ilegal, es una de las especies más cotizadas y el saqueo de ejemplares continúa.
 Los adultos de esta especie miden 85-96 cm de cabeza a cola, con peso corporal un poco más que 1 kg, longitud de ala en promedio 41 cm, y longitud de cola en promedio 53 cm. En lo general su plumaje es del color rojo escarlata, y las plumas cobertoras y secundarias de las alas presentan un color amarillo. Las plumas cobertoras de la cola presentan un color azul claro, mientras las plumas cobertoras primarias son rojas. En el pico, la mandíbula superior es de color hueso, mientras la mandíbula inferior es negro mate. El iris es color amarillo, y las patas color gris oscuro. Los juveniles son similares, excepto por el iris que es de color café claro.

EL OSOS NEGRO.

El oso negro (Ursus americanus) es uno de los carní- voros mayores de México, históricamente su rango de distribución comprendía la mayor parte de los estados del norte y algunos estados del centro del país. Sus poblaciones se han reducido considerablemente en los últimos 50 años y actualmente forma parte de la lista de especies en peligro de extinción. Considerando la alta densidad de osos, la población de la Serranías del Burro en Coahuila se encuentra en la categoría de protección especial (SEMARNAT 2001).
El oso negro en México se distribuye preferentemente en las zonas montañosas donde encuentra refugio y alimento. Es una especie muy adaptable y puede habitar en áreas semidesérticas y de matorral, cercanas a montañas que le brindan mayor cobertura. En sus aéreas de distribución actual es posible encontrar osos negros en el matorral tamaulipeco, el matorral semidesértico, así como en bosques de pino y en bosques mezclados de pino-encino.
En invierno y primavera, los osos negros se alimentan principalmente de bellotas, chapote, insectos, yuca, madroño, zacates, hojas de encino y sotol. En el verano se alimentan de diferentes frutos entre los que también incluyen las bellotas, juníperos, ciruelo, uvas silvestres (Vitis sp.), cogollos de sotol y yuca, insectos, pequeños reptiles y mamíferos, e inclusive crías de venado cola blanca (Odocoileus virginianus); y también de carroña de animales silvestres y domésticos
Son capaces de  ponerse en pie   llegan a medir hasta más de 2 metros y la altura en cuatro patas es de hasta 1 metro.
Las hembras generalmente se reproducen cada dos años y normalmente tienen de una a cuatro crías, aunque dos a tres es lo más común.
Sus ojos son marrones. Su visión no es especialmente buena pero la experiencia pone de manifiesto que le permite distinguir los colores. En cambio, su oido y su olfato están muy desarrollados; su lengua ágil y sus labios móviles le permiten comer pequeñas bayas y hormigas. Por último, es de perfil facial recto y su morro puntiagudo.

LA VAQUITA MARINA.                               
La vaquita marina o cochito es una especie de cetáceo odontoceto de la familia Phocoenidae, una de seis especies de marsopa. En total quedan 97 ejemplares de vaquita marina. Se han puesto en marcha medidas de conservación.
Habita en la reserva de la biósfera del alto golfo de California.
Desafortunadamente la pesca con redes de "enmalle" han ocasionado que la vaquita marina se encuentre muy cerca de la extinción. Por lo que ver un espécimen de la mítica vaquita marina es casi imposible.
La vaquita marina es uno de los cetáceos más pequeños del mundo. Llega a pesar hasta 50 kg. Con 150 cm aproximado de largo. Una característica en esta especie es la apariencia sobresaliente de los labios. La parte superior del cuerpo es gris oscuro, la parte inferior es de casi blanca o gris claro. Las aletas son proporcionalmente más grandes que en otras marsopas. Esta enigmática especie es muy tímida, y no salta como los delfines en la superficie del mar, sino simplemente emerge algunos segundos para tomar aire.
Se cree que las vaquitas viven aproximadamente 20 años en condiciones ideales.
                                                        EL MANATI

El manati es parte de los grandes mamíferos, debido a la forma en que está diseñado su cuerpo, el manatí no se adapta a la vida en aguas frías, su hábitat son las aguas tropicales.
En México su distribución incluye las costas del golfo de México y del Caribe, desde Tamaulipas, hasta el sur de Quintana Roo. Se ha reportado en sistemas de humedales en Veracruz, Tabasco, Campeche, Chiapas, Yucatán y Quintana Roo; es en este último lugar en donde durante los últimos años se han desarrollado un mayor número de acciones en favor de la especie, esto es porque la zona cuenta con aguas transparentes y movilidad regulada, lo que facilita su observación y estudio.
El manatí es un animal herbívoro se alimenta solo de platas. Su Cabeza, cuello, tronco y cola se reúnen íntimamente formando un solo cuerpo, cilíndrico y fusiforme. Se distingue por su cola aplanada y en forma de cuchara y por sus dos aletas con tres o cuatro uñas. Es de color gris, en ocasiones con lunares blancos en el vientre. La piel del manatí, desnuda y rugosa, está cubierta de pelos cortos y muy esparcidos, sin formar un verdadero pelaje que pudiera dificultar su locomoción, Debajo de ella se encuentra una espesa capa de grasa, que le protege de la frialdad del medio en que vive. La boca tiene el labio superior hendido, sus partes laterales son tan móviles que obran a manera de tijeras, y despedazan las hojas y los tallos. Numerosas cerdas rígidas y cortas cubren los labios y actúan como verdaderos órganos táctiles. La dentadura del manatí presenta una dentadura presenta solo algunas muelas atrofiadas y en lugar de dientes, placas córneas que le sirven para masticar sus blandos alimentos. Carece de orejas y su sentido mas desarrollado es el de la vista. Es un animal tímido e inofensivo. Se ve solo o en pequeños grupos.

EL CONEJO DE LOS VOLCANES.
Este conejo de los volcanes (Romerolagus diaz) de pequeñas dimensiones también recibe el nombre de teporingo o zacatuche.
Se localiza en la parte central del Eje Neovolcánico de México, entre los 2.800 y 4.200 metros de altura, en una zona conocida como el zacatón, donde abundan los bosques abiertos de pinos con una cubierta vegetal densa de hierbas. El sustrato está compuesto de roca basáltica oscura con parcelas de tierra también oscura. La especie también se encuentra en bosques oscuros y húmedos de aliso con abundancia de hierbas y arbustos. Tienden hacer parte de la red alimenticia ante sus depredadores como serpientes, aves rapaces (diurnas y nocturnas) y mamíferos como prociónidos, mustélidos, cánidos y félidos.
Actualmente el conejo de los volcanes se encuentra bajo la etiqueta de ‘En peligro’ de modo que su situación no es la más crítica, pero todavía está lejos de salvarse. Aún y así, al parecer la última tendencia del conejo de los volcanes es incrementar su población.
Su tamaño es  pequeño con las extremidades cortas, orejas pequeñas y redondeadas, cola muy corta no visible externamente (Cervantes et al., 1990). Llega a medir alrededor de treinta centímetros de largo, mientras que su peso se sitúa en los 400 gramos aproximadamente. Tiene Pelaje corto y denso de color amarillo mezclado con negro en el dorso y las partes laterales; la base y la punta de los pelos de guarda son negros con la parte media amarilla. Suelen convivir en grupos formados entre dos y cinco ejemplares y continuamente se pelean y juegan entre ellos.
 Se alimentan a través de pastos, hierbas, así como arbustos y todo tipo de hojas de los árboles. También consume frutos del bosque y frutas, de modo que al defecar las semillas, colabora sin ser consciente, en la procreación de la vegetación. Del mismo modo que ocurre con otras especies de la familia, hay ocasiones en las que ingieren sus propios excrementos para retener agua y nutrientes.
EL TAPIR.
 El tapir es el único representante vivo de la familia de los tapiridae del genero Tapirus y también considerado familiar lejano del caballo y del rinoceronte. Son cuatro las especies conocidas de ese animal: tapirus bairdii, tapirus pinchaque, tapirus terrestris y tapirus indicus; todas, excepto la última, están en peligro de extinción ya que el hombre considera de mucho valor su grasosa carne, que garantiza el alimento para varias familias
El tapirus bairdii es la única especie que habita en el sureste mexicano, aunque se ha visto notablemente mermada, al grado de que sólo es posible encontrar uno después de varios meses de intensa búsqueda.
La cacería indiscriminada, la destrucción de su hábitat, su bajo potencial reproductivo y su docilidad, han sido las causas de la amenaza de extinción.
El tapir tiene pelaje pardo a grisáceo y el borde de la oreja blanco. El tapir también posee el labio superior alargado en forma de probóscide. Se alimenta principalmente de helechos, hierbas, lianas, arbustos y árboles, de los cuales consume hojas tiernas y maduras, tallos tiernos, frutos, corteza y flores; invierte entre el 70% y 90% de su tiempo en alimentarse.
Como características generales, al observarlos vemos que el tapir tiene un cuerpo compacto y la cabeza y cuello robustos, con el fin de facilitarles mejor el paso a través del denso follaje tropical. Los pies presentan cuatro dedos en las patas delanteras y tres en las traseras, y el pelaje suele ser muy corto y oscuro, aunque las crías presentan un pelaje pardo con manchas crípticas, similares a las de los jabatos jóvenes, que se difuminan con la edad.
El tapir se caracteriza por tener el hocico alargado en forma de probóscide (pequeña trompa), adaptación para poder arrancar las hojas, hierbas y raíces de las que se alimentan. Esta trompa resulta especialmente útil para recolectar plantas acuáticas en los pantanos donde suele pasar buena parte del día. También le sirve para coger agua y para enfrentarse a otros machos en época de apareamiento.
Son criaturas tímidas y silenciosas que raramente se ven en el día, pues son mucho más activos durante la noche; y aunque su vista no es muy buena, sus sentidos del olfato y del oído están muy desarrollados, los utilizan para notar la presencia de posibles depredadores, los felinos. El tapir pueden alcanzar una longitud de hasta 2 metros, y un peso de hasta 300 kg, curiosamente las hembras suelen ser un poco más grandes que los machos. 

CONCLUSION.
En conclusión, nuestra fauna mexicana cuenta con una valiosa  riqueza de animales, que diez de ellos se encuentran en mayor peligro de extinción debido a que  cada día presenta amenazas por la humanidad al grado de llevarla a la desaparición total.
Las diferentes causas de  como el hombre ha sido participe de esta devastación ha sido a través de la destrucción del hábitat natural, contaminación del medio ambiente (aire, suelo y agua), y el de mayor problema de destrucción es la cacería, todo han ido causantes que nuestra fauna se  encuentra en una línea roja. Es por eso que si bien el hombre  ha creado el problema, es también el más indicado para impedirlo, creando nuevas formas de preservación de la vida animal y  participando en los programas de conservación de los animales que actualmente  están en peligro de seguir extiendo.

¿Por qué elegí este tema?
Este tema  lo elegí pensando en conocer individualmente de los animales que forman  la fauna mexicana que en la actualidad están con mayor en peligro de extinción, por causa  de  la  destrucción de sus hábitat y  la cacería sin control que el hombre ha provocado.

¿De dónde partí para empezar a escribir?
Partí al leer el artículo los mamíferos mexicanos en peligro de extinción. Y quise investigar más  y saber cuáles animales  eran con mayor riesgo de  existencia. Encontrando así  10 animales con mayor peligro de extinción.